domingo, 2 de diciembre de 2007

A los minutos

Que he de darle al papel
y a la aguja que me ha de tatuar.
Que he de ser sin su piel
de momento me distraigo a pensar.

Quiero correr al reloj
y a su cortante paso de tiempo
me hizo trizas al amor?
o yo lo hice, no lo recuerdo.

Busco doces en seis,
y las noches me golpean de pronto.
Dejo el daño de actuar
y filosofo mi apariencia de loco.

Quiero matar al dolor
pero odio tener que caer para hacerlo.
Ya no quiero contar
acostado en deshoras te vas.

Deduzco lo que ha de venir
he caminado siempre contra el reloj
y la herida en la sien
es el golpe que me dieron un mes.

Porque nunca dije que fuese facil
solo no permito enfrentar
la idea vaga de que ya te vas
y yo con el recuerdo intacto
de esas noches sin ti.

Les cuento algo ahora que el tiempo ya se me ha rajado, que los minutos me rompen el alma porque siempre la he peleado pero nunca me habia tocado que todos los deseos juntos me atropellaran en un segundo dado y que luego se me fueran, y no me llevaran consigo.
Saben que pienso del destino? son como esas gotas cuando no llueve, que caen de la terraza, lentamente, o esas gotas que se escapan en el baño... To golpean tan lentamente que no te das cuenta, pero sentis el peso cuando se acumula, me fue llegando la costumbre de estar feliz, me mataron de un golpe, o sea, se me cayo el techo encima.
Besos a los moribundos, dejo cartas a los mas de 1000 minutos que no hicimos nada y solo hablamos y nos herimos, para los demas tambien dejo un abrazo

viernes, 24 de agosto de 2007

Un minuto en tus pechos (Anonimo)

Y pasaba todo el tiempo colgado, quizas las mañanas eran tardes en segundos y cuando te veía ya era de noche. Y el exceso contigo no bastaba y huían las horas despavoridas para que te esfumaras de mis manos, cosa que la mañana me encontrara nuevamente solo en el cuarto. Y vuelto a la actividad, dejara por detras la mañana y la tarde y te tomara la noche, y yo, por sorpresa.

Y los minutos que no estás
no los recuerdo porque creas en mí
caparazón de malos y buenos momentos
y si me generas placer, no lo sé
porque cuando intento recordar,
nuevamente vuelves a mi cuerpo.

Y si abusamos de las cosas que nos dan es por la delicadeza que nos damos todos los días, de no pensar en átomos ni raíces y tocarnos con el ritmo de la canción del silencio y los versos de tu boca loca, que entre momentos decides cambiar. No entiendo aún si es para provocarme, o si es para escapar al deseo; dejarlo fluir por tu cuerpo.

Y si te miro a los ojos,
cosa que me parece oportuno.
No encuentro en ellos verdades.
No me importa en absoluto,
me ahogo firme en tus mares
aunque naufrague.

miércoles, 22 de agosto de 2007

Que estas en mi alma (Ernesto)

No solo de pan viviré,
y yo más
que he sobredesarrollado
el sentido del querer.

Lágrimas no tengo,
se fueron por mi ultima palmada
que la vida, así como la ves
me dio cuando me vine de ahí.

Dormidas las ganas de quedarme
que haciendo?
contando las horas
para marcharme.

Y tú, que nunca estás sola
y yo te veo tan débil
y hermosa,
hielo esa imágen.

Y el futuro dirá si nos encontramos
cuanto de mí has recordado,
alguna palabra, gesto, abrazo
cuento, risa, milagro.

Y amiga, cuenta con todo
porque no te niego ni el aire que exhalo
que es tan profundo y sereno
como para esperar tu llamado.

Y amiga, el cariño
que tengo, y que me inspira
a la propuesta mas loca
y al valor a lo incierto.

Y que mis ojos no se engañen,
porque felicidad viven a menudo
sólo, que cuando es contigo
la disfrutamos juntos.

Y eso, que no me disgusta
genera en mi pereza de celos
porque me regalas tanto
que hasta compartirlo quiero.

Y es que desbordado,
intento devolverlo
y pienso que no es tanto
mis consejos a tus ojos,
mi tiempo a tu respiro.
Que lo compartes tan graciosamente
conmigo.
Gracias os digo.

Y que si te falta tiempo
te doy mis dias y horas,
y si te falta aliento
te doy lo que tengo y lo que sobra.

Y no deseo el vuelto
aunque yo lo entiendo.
Es algo imposible, de tí
siempre hay agradecimiento.

Que es con cada mirada,
palabra, sonrisa, reflejo.
Un mate o una razon,
viene disfrada de cielo.

Y me lo regalas
y yo lo quiero,
y soy de los que no quieren
dejarte nunca sin eso.

Aunque sé que eres fuerte
y te levantas sin esfuerzo.
Porque has sabido luchar,
y tienes la fortaleza
para levantarte tú
y ayudarme a mí
en el intento.

No sé cuanto te debo,
ni cuanto tú me has dado en préstamo
solo entiendo este lenguaje
el de mi cuerpo.

Que si exhalo con dolor
es porque te siento lejos
y si te miro con dolor
porque dejarte no quiero.

Sé que lo sabes y no lo dices
pero no es por miedo.
Yo no te ayudo porque lo sé
tú puedes con todo esto.

Te acudo con la razón
de compartir tu dorado tiempo
ese que me calienta
cualquier noche de invierno,
como las que paso ahora.
Yo lo sé, tú lo sabes

Necesito el silencio,
y necesito tu voz, y necesito ese gesto
y te doy todo mi tiempo
tu organiza el devolverlo.

Que con cada semestre que dé
te pido una mirada o un "nos vemos"
y por cada vida que te dé,
una palabra, un momento,
el saber que mejoras
el saber como te lleva
esta vida que tiene cosas
y se vuelve tan loca.

Que me muero de ganas
de entregarte lo que te falté
y si te faltan ganas,
házmelo saber, te doy mi par de alas,
mi alma para que no sufras,
mi vida, una flor y ternura.

Para vos amiga que estás lejos, que te extraño y quiero. Espero volver a compartir al menos el tiempo.

martes, 21 de agosto de 2007

Sos algo divino

Ciertamente oscura la zona que escondes,
duramente intruso me tientas de veces
y como la vida que fluye.
Espero la vida me junte de veces.

Escribirte en las mañanas o cuandos duermes,
el pan, la leche, las tostadas que hago
que como, que guardo para otro semestre.
Todo tiene que ver con tus días.

La vida, vida mía, cuesta pero es simple,
sensilla, costeando la vagancia y la monotonía,
discreta, la mano que poso sobre tu hombro vigía
concreto es el aire que exphiro con gana infinita.

Y es que las ganas de hablarte son miles
y más si es por la mañana cuando despierto.
Soñoliento, café, mochila, cuadernos, sin ganas
dejo el telefono sobre tu mesada.

Y sé... que aunque tardío no esperas que acuda
porque? las cosas que haces me llevan a recorrer la locura,
no sé... mañana lo mismo, en la busca de alguna aventura.
Y a tí te tendré en el mismo lugar donde gustas.

Verdaderamente los problemas varían,
y son conscientes las mentes que los originan.
El temor, las ganas, daños, relatos
tu voz o la mía.

La escuela, el recreo, las dudas, el llanto,
tu alma y la mía.

Pero las cosas no son infinitas,
y lo malo se desvanece, aunque nadie desea pasarlo
nos hacen más fuertes.
Contando las gotas de agua helada que cubren tu rostro.

Sé, amiga, que todo esto que nunca tuvo sentido
lo entiendes tú, mi alma y todo minuto perdido
que es de las ganas que ganan los hombres,
no las victorias,
que es que te quiera mas que a mi memoria.

Los errores son todo lo que tenemos para aprender a querernos
los vasos vacíos, los platos con restos de algo comido.
Y yo con quererte, te dejo la idea que dije de veces.
Sos algo divino, sigue como estas, llora conmigo, te quiero.
Sos algo divino.

Para vos cuando estés muy dolida, y seguro tienes la mente en el miedo de cómo, en qué momento, y yo debí hacerlo mejor... La quiero mucho, espero mejores porque perder es una foma de aprender, las grandes cosas no se hicieron de certezas, sino de errores. Y Dios debio haberle errado contigo, porque creó al ser más bello y cariñoso del mundo en que vivo.

P/D: PostData!

lunes, 20 de agosto de 2007

Hay tantas cosas (Ernesto)

El salir contigo,
el hablar contigo,
besar, cantar, bailar o tomar.

De todas estas cosas,
no te he dicho ninguna al oido
y solo me mantengo viendo
mientras tu me enseñar a andar.

El compartir las papas,
el tocar tu pelo y el abrazarte,
tomar tu brazo y posarlo sobre el mío.

Y es verdad que sos mi fuente
y fuente sos de quien te conoce
sustento de las ganas cansadas
y deseos de los sueños dormidos.

Quien conoce tu cuerpo?
El cielo, las olas, las aguas
que brotan de seno del mundo a tu rostro.

Cuentan los cantos que fueron
que siendo contigo se armaron de sueños
te vieron, e hipnotizados
dejaron de pensar para estar en ti.

Tomar contigo, las particulas nuestras
que se repelen a tiempo completo
se juntan, crecer contigo.

Sois de esas almas que desaparecen?
Y sé que algun día me costará olvidarte
y me cortaré en cientos mi estandarte
que me mantiene con ganas de sueños.

Tocar tu rostro, y acariciar esa nariz
que son mi vida.
Sueño que se diluye y mis dias...

Que las cosas dejan huellas,
y mañana me verás pidiendo al sueño
descanso.

De todas estas cosas,
no te he dicho ninguna al oido
y solo me mantengo viendo
mientras tu me enseñar a no olvidar.

Jugar, soñar, amar...

sábado, 18 de agosto de 2007

Delirio I (Ernesto)

Cuando llegaste a mi ventana
no te alcance a ver el pelo,
los labios fueron objeto
de mi desviado atropello
de no haberte visto el alma,
para no olvidarte el cuerpo.

Y se que te he dejado lejos
como mil pasos al cielo,
dos al lado, y a tus pechos.
Cosas que no quiero en la vida,
es verte en un atropello
y que me quede en silencio.

Es verdad ya no te he visto,
y la ultima vez de ello
lloré cuando te fuiste, y fue por dentro.
No fue porque no vinieras hermosa
no es cierto,
sino por no haberte besado tu beso.
Que me diste esa tarde, amiga
oculto en aquellos versos.

Y ahora que no tengo nada,
y quizas tampoco lo pierdo.
Obviando que lo que dices es cierto.
En cada una de esas promesas
cumplidas ocurren mil reacciones
en mi cuerpo.
No es mi mente la que dirige
sino mis sentimientos.
Y los dejé esa tarde de celos
en la que me mataste con tu beso.

Y que la mañana no compre las alas
yo me compraré el boleto
para ver como es que sueñas
y de esos momentos.
En que no lo sé,
no se lo que pasa por tus pensamientos.
Pero al menos la duda
me deja posibilidad de un ciento
que entre los sueños hermosos
estemos tu y yo como la llama y el fuego.

Que entre esos sueños seamos
como esa flor y el nectar espeso.

O que se funda el dolor,
y seamos dolor y remedio.



Duramente puede ser la critica a estos versos porque me he portado bastante cursi aunque no lo quise. Parece que hoy mi alma esta medio envuelta en pena.

De las cosas que nunca digo (Ernesto)

Son de amor esas rosas
y sus petalos, niños
que deshojan las horas
de mi tiempo contigo.

Que me atienden palabras
y no busco un respiro.
No te estoy criticando,
solo busco tu abrigo.

Y alli van las palabras,
y esas rojas no digo.
Entonando el lamento,
de la duda, el delirio.

Porque son solo besos,
algo de amor, y cariño.
Y en mi mente el deseo,
de decirlo contigo.

Y mientras dia tras dia
me espantan las horas que vivo,
busco en falso tus llamadas,
tus mensajes, algo vivo!

Y solo veo la mañana,
mi cama y algun amigo.
Y de dolor se me endurece el alma
y el corazon de frío.

Por eso al tiempo,
ese que hemos perdido,
lo busco incesantemente
en este invierno vacío.

Y aunque no entiendo si es por amor,
si es con cualquiera o contigo,
tengo la razón absurda de creer en mi mismo
cosa que no he podido...

Decirte al oido,
con el calor de mis labios
y el va y ven de tu respiro.
Que entre todos mis suspiros
te he dejado cien mil cariños.

Romantico o cursi, la septima galaxia manda jajaja.
Solo quise desahogarme y presentarme asi, suerte a todos.
Espero el proximo sea mas interesante.